Golf Club
En 1935, por iniciativa de don Diedrich Daniel Meyer, más conocido por todos como Don Diego, surgió la idea de crear una cancha de golf. Su gran pasión por los árboles, además de las posibilidades que ofrecían los terrenos aledaños a su estancia “El Retiro”, hicieron que el sueño anhelado fuera tomando color hasta convertirse en realidad.
Con el apoyo de un grupo de amigos entusiastas, vecinos de la zona y algunos ingenieros del entonces Ferrocarril del Sud, y con los mismos profesionales del Ituzaingó Golf Club, comenzaron a trazarse los primeros 9 hoyos teniendo en cuenta el recorrido del arroyo San Bernardo, para hacer más pintoresco el diseño de la cancha.
Pedro Churio, quien también diseñó la cancha del Golf Club Los Acantilados de Mar del Plata, fue quien se encargó de llevar a cabo semejante empresa.
Así, el 26 de enero de 1936, se inauguró finalmente el campo de golf con un torneo que concluyó con un agasajo aún hoy recordado por alguno de aquellos socios fundadores que concurrieron a dar el tan ansiado primer golpe.
El año 1951 trajo consigo la construcción de los 9 hoyos restantes. De este modo, la cancha totalizaría los 18 hoyos. En este caso, el ingeniero Luther Koontz, diseñador también de los trazados de las canchas del Club Náutico San Isidro, Olivos Golf Club y del Golf Club Argentino, se encargó de esta hermosa tarea.
Ya en estos años, jugar al golf en Sierra de la Ventana había adquirido renombre y su cancha, con una de las extensiones más largas del mundo, comenzaba a tener una mística que no perdería nunca.